Nuestro siguiente ganador del Concurso de Relatos Navideños es Álvaro, de 2º B. Desde aquí le damos nuestra enhorabuena.
Esto era un niño llamado Vicent van Gogh, pequeño, con ojos azules, muy buen pintor y estudiante, pero a la vez tímido. En el colegio siempre se metían con él y no le dejaban en paz; él siempre les decía: "¡Dejadme en paz!", pero ellos seguían. Él, como era muy listo, siempre les decía que no hay que meterse con los demás, que todos somos iguales, tal y como dicen los valores humanos.
Un día hizo un bonito cuadro que le costó mucho trabajo, porque se acercaba la Navidad y quería tenerlo todo bien preparado, pero esos niños le destrozaron el cuadro. Se armó tanto de valor y de enfado, que decidió meterse con ellos y decirles un par de cosas, pero los niños se mosquearon y el pobre Van Gogh, asustado, se fue corriendo a su casa perseguido por aquellos niños. Él corrió más que los niños y se metió en la casa de su vecina y ella le dijo que se escondiera en una habitación que tenía vacía. Así lo hizo, se quedó allí un rato hasta que subió la vecina para decirle que ya se habían ido. Fue tanta su felicidad que se dispuso a hacer el cuadro de aquella habitación: ventana en frente, a la izquierda una silla, detrás el armario, a la derecha la cama y la puerta.
Él quería ganar el concurso del colegio de pintura, que era dentro de una semana: ¡necesitaba un milagro! Según cuenta en ese momento apareció un ángel que le ayudó a hacerlo bien para que le diera tiempo a llegar al concurso. Al final le dio tiempo. El premio para el ganador era de 1000 euros.
Llegó el día de la entrega de los cuadros. Él estaba nervioso, pero aún más cuando anunciaron al ganador. ¡Había ganado! Se sintió tan bien que lo que hizo con el dinero fue entregarlo a una ONG para que los más necesitados pudieran tener así buenas Navidades.
Desde entonces, es un cuadro muy famosos, conocido como La habitación de Van Gogh, hecho en 1889.
ÁLVARO. 2º B
No hay comentarios:
Publicar un comentario